viernes, 10 de abril de 2015

Relación entre el mal gobierno y la alimentación sana

Actualmente, se aprecia como saludable el consumo de alimentos integrales. 
Pero en generaciones anteriores, parece lógico que, por ejemplo, existiera un rechazo a los panes integrales.
Hay que tener en cuenta que el refinado de la harina, viene aparejado a un refinado de las costumbres.

O sea, que una familia “refinada”, debía poderse permitir comer pan blanco que tenía mejor presencia.
Y era un pan al que se le había retirado el salvado o cascarilla, que era la parte de la “cascara”.
O sea, que a su entender se quedaban con lo que consideraban como “la parte noble del alimento”.
Y el resto se lo daban a los animales.
Por supuesto, los pobres sí seguían comiendo el grano completo (con su germen, fibra, y vitaminas), que los ricos rechazaban.
Esto puede explicar en parte,  porque las clases pudientes no tenían más salud que los demás, aunque llevasen una vida mejor.
Y es que los errores en cuanto a alimentación han ocasionado grandes paradojas.
De sobra es conocida la imagen de los reyes y grandes señores con la enfermedad de la gota debido al acido úrico que les provocaba la gran cantidad de proteína animal que consumían.
Por otra parte, llevaban una vida muy sedentaria. Incluso los  vestían para que  no tuvieran que moverse.
Creo que esto hizo un gran daño a la evolución de la sociedad.

Un dirigente con poca salud, no será demasiado eficaz en su trabajo, que precisamente debe ser el de ir consiguiendo una sociedad cada vez más avanzada.
Y la mezcla de excesos y errores alimentarios, unida a la falta de actividad física, no es la mejor forma de estar saludable.
Imaginemos a un señor feudal, señor  de vidas y haciendas, que está frecuentemente amargado por que los dolores de gota, artritis, malas digestiones o ulceras estomacales no le dejan vivir.

Mas te valía no depender de las decisiones de un señor así.
La mala alimentación de los gobernantes ha podido ocasionar mucho sufrimiento a sus gobernados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario